La Experiencia
Dando forma a tu historia
En 1000 Historias te acompañamos desde la primera conversación hasta el momento en que levantás una copa de tu propia cosecha. Según las elecciones que hagas, el proceso suele durar entre 12 y 18 meses.
Capítulo 1
Una llamada de descubrimiento para conocer qué querés celebrar.
Una vez que te contactás con nosotros, coordinamos una breve llamada de descubrimiento. Allí escuchamos: qué querés celebrar, el significado detrás de tu vino, las personas con quienes lo vas a compartir. Este primer paso marca el tono de todo lo que sigue.




Capítulo 2
Sesión privada de planificación enológica con Julia
Tu experiencia continúa en una sesión privada con Julia. Juntos exploran variedades de uva, degustan muestras y consideran tipos de barrica.
Cada decisión define el carácter de tu vino: intenso o delicado, con mayor crianza para más profundidad o con menos tiempo para más frescura. Con la guía de Julia, cada elección es intencional, y cada botella te refleja.




Capítulo 3
Botella, corcho y etiqueta.
El vino es más que sabor; es un objeto que se sostiene, se comparte y se presenta. Aquí elegís la forma de la botella, el corcho y, lo más importante, diseñás la etiqueta. Algunos clientes traen sus propias ideas, otros se apoyan en nuestro equipo de diseño, pero en todos los casos el resultado es inconfundiblemente suyo.




Capítulo 4
Producción y entrega
Una vez tomadas tus decisiones, comienza la elaboración.
Tu barrica descansa y se cría en Mendoza, cuidada de cerca mientras el vino desarrolla carácter y equilibrio. Cuando está listo, se embotella, se sella y se presenta con la precisión de un producto artesanal. Se preparan unas 250 botellas: una cosecha completa que te pertenece solo a vos.




Capítulo 5
El momento de compartir
Y entonces llega el momento por el que valió la pena esperar.
Te entregamos tus botellas, presentadas con elegancia. Algunos clientes eligen organizar una celebración o un evento privado con su cosecha como protagonista; otros guardan sus botellas como legado, para abrirlas año tras año.
Sea cual sea la forma de compartirlo, tu vino se convierte en más que una bebida. Se convierte en un recuerdo, en una herencia, en una historia que sigue viva.






Capítulo 1
Una llamada de descubrimiento para conocer qué querés celebrar.
Una vez que te contactás con nosotros, coordinamos una breve llamada de descubrimiento. Allí escuchamos: qué querés celebrar, el significado detrás de tu vino, las personas con quienes lo vas a compartir. Este primer paso marca el tono de todo lo que sigue.


Capítulo 2
Sesión privada de planificación enológica con Julia
Tu experiencia continúa en una sesión privada con Julia. Juntos exploran variedades de uva, degustan muestras y consideran tipos de barrica.
Cada decisión define el carácter de tu vino: intenso o delicado, con mayor crianza para más profundidad o con menos tiempo para más frescura. Con la guía de Julia, cada elección es intencional, y cada botella te refleja.


Capítulo 3
Botella, corcho y etiqueta.
El vino es más que sabor; es un objeto que se sostiene, se comparte y se presenta. Aquí elegís la forma de la botella, el corcho y, lo más importante, diseñás la etiqueta. Algunos clientes traen sus propias ideas, otros se apoyan en nuestro equipo de diseño, pero en todos los casos el resultado es inconfundiblemente suyo.


Capítulo 4
Producción y entrega
Una vez tomadas tus decisiones, comienza la elaboración.
Tu barrica descansa y se cría en Mendoza, cuidada de cerca mientras el vino desarrolla carácter y equilibrio. Cuando está listo, se embotella, se sella y se presenta con la precisión de un producto artesanal. Se preparan unas 250 botellas: una cosecha completa que te pertenece solo a vos.


Capítulo 5
El momento de compartir
Y entonces llega el momento por el que valió la pena esperar.
Te entregamos tus botellas, presentadas con elegancia. Algunos clientes eligen organizar una celebración o un evento privado con su cosecha como protagonista; otros guardan sus botellas como legado, para abrirlas año tras año.
Sea cual sea la forma de compartirlo, tu vino se convierte en más que una bebida. Se convierte en un recuerdo, en una herencia, en una historia que sigue viva.



Cada viaje toma su propia forma.
Algunos se desarrollan en un barril completo, otros en una colección refinada de botellas. Cada uno lleva una historia esperando ser compartida.
Contacto
Tu experiencia comienza con una conversación
Contanos qué querés celebrar, y juntos crearemos un vino digno de ese momento.
Información
Mendoza, Argentina
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